Pese a todo la vida es bella...
Pese a todo parece que la vida es bella…
Tan solo admirando y comparando las nubes a lado de una persona apreciable puede hacer que el momento que uno vive valga la pena, tanto como también muchas otras cosas… leer un buen libro puede ser un orgasmo para la cabeza, mientras escuchar aquella música que uno puede disfrutar, sea saltando como pulga de un lugar a otro agitando la cabeza, o simplemente en paz disfrutando las voces y cambios de acordes… el de repente lanzarse de farra con unos amigos, ser apañado en ajedrez para devastar después en domino y finalmente ir por unos buenos tacos de madrugada para que no se sienta tanto el alcohol… es curioso como llegan a ser difíciles de encontrar esos amigos pero como hay tanta gente que vale la pena.
En cuanto a esto, creo ser afortunado pues desde hace unos años que esta clase de personas cambiaron bastante mi actitud para con los demás, antes mayormente agria y con tendencia a un individualismo egoísta… poco a poco fui descubriendo que pese a todo hay gente que vale la pena, y con quien resulta fácil encontrar esos momentos por los que vivir es bello. Tal situación parece haber comenzado a cambiar en mi, si mal no recuerdo, hace aproximadamente 5 años… tiempo antes del cual yo me caracterizaba mas que nada por, primero, haber sido muy hosco, y después, cuando a bien comenzó este cambio, haber sido silencioso guardando siempre la expectativa para con lo que sabía se venía dando. En esta época conocí a una persona total y completamente opuesta a mi: una mujer, un año menor que yo, que de manera que en realidad me alejaba un poco, era aquello que toda preparatoriana de su edad quisiera llegar a ser, una de esas mujeres populares a las que todo el mundo seguía, siendo hombres arrastrándose por ellas y siendo mujeres copiándole.
Lo mas cómico fue cuando le conocí… como me burlaba de ella por su forma de ser de una manera directa, cuando de la nada se acerco para hablarme de alguna cosa sin importancia. Aparentemente di en el blanco sin haber tenido la intención, pues esa forma de ser parecía terminar siendo una carga para ella al grado que vivía a las expectativas de los demás en vez de hacerlo conforme a su propia expectativa.
Aunque en un principio, como en aquella primera ocasión, todo pareciera darse en una dinámica de burlas y bromas, pronto me di cuenta que algo surgía entre los dos sin que llegásemos a darnos cuenta… Aprendimos bastantes cosas el uno del otro y a partir de eso supongo que comencé a confiar un poco más en la gente que llego a conocer. Los opuestos no siempre son tan buenas combinaciones, pero la mayor parte del tiempo lo son.
En fin… aún hablo con ella, aun cuando ahora vive algo lejos. Este fin de semana precisamente, tras reunirme con un grupo de amigos que conozco desde hace 4 años, llamó a mi casa y tras hablar con ella un buen rato, miraba por un momento a las nubes en el cielo, y fue como si las volviera a ver con ella.
N.B. Sé que se extrañarán un poco las tripas y viseras, pero cuando se tiene algo así en mente, la muerte y la ficción pueden esperar… je.
Tan solo admirando y comparando las nubes a lado de una persona apreciable puede hacer que el momento que uno vive valga la pena, tanto como también muchas otras cosas… leer un buen libro puede ser un orgasmo para la cabeza, mientras escuchar aquella música que uno puede disfrutar, sea saltando como pulga de un lugar a otro agitando la cabeza, o simplemente en paz disfrutando las voces y cambios de acordes… el de repente lanzarse de farra con unos amigos, ser apañado en ajedrez para devastar después en domino y finalmente ir por unos buenos tacos de madrugada para que no se sienta tanto el alcohol… es curioso como llegan a ser difíciles de encontrar esos amigos pero como hay tanta gente que vale la pena.
En cuanto a esto, creo ser afortunado pues desde hace unos años que esta clase de personas cambiaron bastante mi actitud para con los demás, antes mayormente agria y con tendencia a un individualismo egoísta… poco a poco fui descubriendo que pese a todo hay gente que vale la pena, y con quien resulta fácil encontrar esos momentos por los que vivir es bello. Tal situación parece haber comenzado a cambiar en mi, si mal no recuerdo, hace aproximadamente 5 años… tiempo antes del cual yo me caracterizaba mas que nada por, primero, haber sido muy hosco, y después, cuando a bien comenzó este cambio, haber sido silencioso guardando siempre la expectativa para con lo que sabía se venía dando. En esta época conocí a una persona total y completamente opuesta a mi: una mujer, un año menor que yo, que de manera que en realidad me alejaba un poco, era aquello que toda preparatoriana de su edad quisiera llegar a ser, una de esas mujeres populares a las que todo el mundo seguía, siendo hombres arrastrándose por ellas y siendo mujeres copiándole.
Lo mas cómico fue cuando le conocí… como me burlaba de ella por su forma de ser de una manera directa, cuando de la nada se acerco para hablarme de alguna cosa sin importancia. Aparentemente di en el blanco sin haber tenido la intención, pues esa forma de ser parecía terminar siendo una carga para ella al grado que vivía a las expectativas de los demás en vez de hacerlo conforme a su propia expectativa.
Aunque en un principio, como en aquella primera ocasión, todo pareciera darse en una dinámica de burlas y bromas, pronto me di cuenta que algo surgía entre los dos sin que llegásemos a darnos cuenta… Aprendimos bastantes cosas el uno del otro y a partir de eso supongo que comencé a confiar un poco más en la gente que llego a conocer. Los opuestos no siempre son tan buenas combinaciones, pero la mayor parte del tiempo lo son.
En fin… aún hablo con ella, aun cuando ahora vive algo lejos. Este fin de semana precisamente, tras reunirme con un grupo de amigos que conozco desde hace 4 años, llamó a mi casa y tras hablar con ella un buen rato, miraba por un momento a las nubes en el cielo, y fue como si las volviera a ver con ella.
N.B. Sé que se extrañarán un poco las tripas y viseras, pero cuando se tiene algo así en mente, la muerte y la ficción pueden esperar… je.
Comments
¿es albur?
Bueno , ya , serio. La inteligencia es una capacidad que se tiene en forma fragmentada ; es decir una persona es inteligente para una cosa y no lo es para otra . De tal manera que para las relaciones humanas se necesita un tipo de inteligencia diferente que para entender matemáticas o filosofía ; se necesita intelgencia emocional y quienes no tenemos este tipo de inteligencia debemos hacer un esfuerzo extra para aprender a relacionarnos sanamente.
Depende también de lo afines que son las personas con uno... hay lugares con/y personas que simplemente terminan hastiandolo a uno al no tener afinidad alguna con uno mismo.
Las cosas aqui expuestas, empero, estan sujetas a derechos reservados... fuera de ello... los desconocidos del planeta pueden armar sus blogs dedicados a mi persona... no hay problema.